Aquella melodía, taciturna y ágil.
Resonaba en mi cabeza,
como sucedió tiempo atrás.
Acaso retornaban los sueños.
Sentirla de nuevo me embriagaba.
Su sonido me guiaba,
mis pies cansados, respondían solos,
a su ritmo infernal.
En las profundidades de la estancia.
Se dislumbraba su fina silueta.
Toque con mis manos, aquellas cuerdas,
finas y afiladas, sintiendo como cortaban mi alma.
Que aunque me mataran, débilmente.
Sentí el sosiego en sus notas.
Resonaba en mi cabeza,
como sucedió tiempo atrás.
Acaso retornaban los sueños.
Sentirla de nuevo me embriagaba.
Su sonido me guiaba,
mis pies cansados, respondían solos,
a su ritmo infernal.
En las profundidades de la estancia.
Se dislumbraba su fina silueta.
Toque con mis manos, aquellas cuerdas,
finas y afiladas, sintiendo como cortaban mi alma.
Que aunque me mataran, débilmente.
Sentí el sosiego en sus notas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario